Conocemos qué significa para Diego Rodríguez su profesión: el diseño e interiorismo. Para él, el buen interiorista parte de la creatividad y por tanto es un artista. A veces, el término decorador se usa frívolamente pero es mucho más que poner dos telas y unas flores; lleva un proceso interno grande y laborioso.
Este interiorista considera que es necesaria una gran comunicación con el cliente para que vivan y entiendan la vivienda desde el primer momento. Tienen que elegir y ver materiales, participar en la elección de todo, ya que eso es un valor añadido que produce éxito.
Diego proviene de familia de médicos pero su padre era también amante de la fotografía y esas inquietudes artísticas se las transmitió desde siempre. Aunque a lo largo de su carera ha trabajado hoteles, restaurantes, joyerías...al final todo eso ha desembocado principalmente en la vivienda.
Diego Rodríguez confiesa que es un investigador incansable de su profesión, ya que lee todo lo posible sobre interiorismo y diseño, averigua nuevos materiales...contribuye a la gran vida que tiene su trabajo en el que es necesario estar continuamente al día.
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